"Yace Utrera en sitio llano, desahogado y descubierto. Goza de alegre, templado y saludable cielo, las calles son anchas y espaciosas. Las plazas acomodadas para fiestas de toros y el uso de la jineta ejercicio que frecuentan" Con estas palabras Pedro Román Meléndez, escritor e historiador local, describía en 1730 nuestro pueblo y nos apuntaba el uso festivo con el que los utreranos disfrutábamos de las plazas.

En Utrera, nuestra cultura mediterránea nos vuelca hacia la calle por ello las plazas son como nuestro salón de estar, allí jugamos de niños, salimos de jóvenes, paseamos de adultos mientras que los hijos juegan y de mayores nos sentamos en los veladores a recordar todos los momentos que vivimos en ella. Nuestras plazas rebosan vida, en ella se representan las diferentes manifestaciones lúdicas, religiosas, deportivas, culturales, etc... son el lugar perfecto para quedar con tus amigos y disfrutar de una animada tarde.